Un viaje en el tiempo para reconstruir las trayectorias de los inmigrantes que desembarcaron en Brasil hace siglos, se ha convertido en la clave para acceder a los derechos inherentes a la descendencia. Con la investigación genealógica, que estudia la evolución de las relaciones de parentesco, los herederos portugueses pueden recuperar los documentos históricos necesarios para el proceso de doble ciudadanía.
A partir de entonces, con la emisión de la segunda copia del acta de nacimiento, pudo iniciar el proceso de atribución de ciudadanía portuguesa y ahora espera el resultado. En Brasil, hay cerca de cinco millones de nietos de padres portugueses, según una encuesta de comunidades portuguesas. El especialista en genealogía e investigador de Martins Castro, consultora en movilidad internacional, Gabriel Dias, dice que, a lo largo del siglo XIX, entre 1890 y 1920, hubo un fuerte movimiento migratorio desde Portugal hacia Río de Janeiro, São Paulo, Pará y Río Grande Sur .